Las chicas han vuelto a suspender los examenes y este hombre ya no sabe que hacer con ellas. Es su padrastro y debe castigarlas, debe enseñarles disciplina. Así va a su dormitorio y las explica como serán las cosas ahora. Luego coloca a una de ellas sobre sus rodillas y comienza a azotarle el culo. Al rato hace que las dos se arrodillen delante de él, es el momento de chupar la verga de papa. El castigo será hasta el final, el padrastro aprovecha el momento y viola a sus hijas, dos colegialas colombianas bien ricas. ¡Así aprenderán y serán más aplicadas en la escuela!…