Novia castigada duramente a manos de su pareja porque una vez más ha vuelto a casa por la mañana después de estar toda la noche follando con su amante. Ella piensa que su novio es gilipollas y es que el tipo trabaja de noches y cree que no se va a enterar de sus escapadas, pero los tíos también tenemos un sexto sentido que nos dice cuando nuestra pareja no está poniendo los cuernos. Quizás esta rubia necesitaba que su chico se aplicara un poco más follando y le diera ese polvo que pedía a gritos desde hacía años. Sin duda el que se llevó la habrá dejado saciada con creces.