Es una gran tentación ver a una hija en lencería roja marcando tetonas y chochito, al menos para los amantes del incesto o sexo familiar. El viejo se estaba afeitando y de repente apareció por detrás su hija mayor en bragas y sujetador. Es una morena despampanante y cualquier hombre caería rendido a sus pies, incluido su padre. Un poco más y se corta el cuello papá con la maquinilla de afeitar, pero se recompuso y siguió como si la cosa no fuera con él. La guarra no iba a parar ahí, se metió en la bañera totalmente desnuda y mirando a su padre desafiante invitándolo a darse un baño con ella.